Uno de los hombres de confianza del exalcalde de Benidorm, Rafael Blasco, se encuentra en prisión


Por: Niky Cuervo

Eduardo Zaplana es el tercer expresidente de la Generalitat Valenciana del Partido Popular (PP) investigado por la justicia en presuntos casos de corrupción. Tres expresidentes del partido conservador que dirigieron la Comunidad Valenciana durante más de 16 años. José Luis Olivas estuvo al frente de la institución un año, de julio de 2002 a julio de 2003, sucedió a Zaplana tras su salto al Gobierno de José María Aznar. Francisco Camps permaneció desde 2003 a 2011, fecha en la que dimitió por el escándalo de los trajes.

Camps fue imputado en marzo por presuntas irregularidades en las contrataciones de la Fundación V Encuentro Mundial de las Familias para la visita del Papa Benedicto XVI a Valencia en 2006, otra de las piezas separadas del caso Gürtel. Y está siendo investigado en otros dos procedimientos: la gestión de la Fórmula 1 en Valencia y la construcción del trazado del circuito de esta competición.

El expresidente de la Generalitat y de Bancaja José Luis Olivas renunció el año pasado «expresa y voluntariamente» a todos sus honores como exjefe del Consell tras conocerse que la Audiencia de Valencia había confirmado la pena de año y medio a la que fue condenado por falsedad y delito contra la Hacienda Pública. Entonces, Olivas ya no era presidente de la Generalitat. Ahora está acusado de los delitos de falsedad en las cuentas anuales de los ejercicios 2010 y 2011 en el marco de la causa que investiga la salida a Bolsa de Bankia.

El exministro de Trabajo y portavoz durante la etapa de Aznar aparecía en una conversación telefónica con Ignacio González dentro de la investigación de la operación Lezo. La gestión de casi dos décadas de Gobierno del Partido Popular en la Comunidad Valenciana se ha visto salpicada por varios casos de corrupción, muchos de ellos todavía en en fase de instrucción. Uno de los más importantes es el relacionado con la cooperación, que se ha saldado con la condena de Rafael Blasco.

El exconsejero de Solidaridad y Ciudadanía, uno de los fichajes estrella de Zaplana y hombre de su absoluta confianza, lleva tres años en prisión; cumple una pena de seis años de cárcel por malversar ayudas al desarrollo destinadas a Nicaragua. A Blasco se le amontonan las causas judiciales. La juez que investiga el caso también ha detectado supuestos amaños en siete contratos de informática adjudicados por su departamento por importe de más de un millón de euros. Además, el exdirigente del PP y otras 20 personas están siendo investigadas por manipular subvenciones y el proyecto de un hospital en Haití.

La mujer de Blasco, Consuelo Ciscar, está acusada de pagar sobrecostes por obras, utilizar exposiciones del IVAM para revalorizar piezas de su propiedad y potenciar la carrera de su hijo, el artista Rablaci, también investigado en la causa, usando para ello recursos y personal del museo.

En marzo, la juez acordó retirarles el pasaporte a ambos y prohibirles salir del espacio Schengen. En la causa judicial están imputadas otras 15 personas.

Sobre El Autor

Periodista: director de los programas El Café Mañanero y Latino Deportes de Latino FM.