El presidente de la Organización
Médica Colegial (OMC) en la Comisión para la
Reconstrucción Social y Económica del Congreso de los
Diputados, del CGCOM, Serafín Romero, ha
comparecido este martes en el Congreso de los Diputados en representación en la que ha presentado 45 propuestas para
la necesaria reforma de la Sanidad y también para
prepararnos para futuras amenazas, tras la experiencia
de “la vulnerabilidad ante pandemias en un mundo
globalizado”.
El presidente del CGCOM ha comparecido ante la
Comisión de Reconstrucción Social y Económica,
presidida por Patxi López (GP Socialista) y con la
participación en la mesa del vicepresidente primero de
esta Comisión, Enrique Santiago Romero (GCUP-EC-GC)
y el letrado de la misma, Fernando Galindo.
Sus primeras palabras, en nombre de la profesión
médica, han sido de “condolencia y afecto” a todas las
víctimas de la pandemia por coronavirus y a sus
familiares, y muy especialmente un recuerdo a los
profesionales sanitarios fallecidos, a los 59 médicos que
“siempre estarán en nuestra memoria, y a los que aún
se debaten entre la vida y la muerte, a los que intentan
superar las complicaciones y a los que siguen en
primera línea asistencial”. Para todos ellos, pidió
“dignidad y respeto”.
En su introducción, ha aludido a la “gran complejidad” e
“incertidumbre” que provoca la pandemia de la COVID19 por los interrogantes que genera su variabilidad, las
secuelas o los propios tratamientos. Por ello, ha dicho
que el regreso a la normalidad es el que “más retos
supone” para la profesión médica.
Ha defendido una “oleada reformista” para llevar a cabo
“las reformas necesarias y para prepararnos ante futuras
amenazas” porque “ya somos dolorosamente
conscientes de nuestra vulnerabilidad ante pandemias
en este mundo globalizado”.
Ha traslado a los diputados que “tienen una deuda moral
con la sanidad y los sanitarios” y ha afirmado que la
profesión médica, con la comparecencia de la OMC en
esta Comisión, pretende trasladar “el papel de palanca
que debe ejercer para interferir y sortear la excesiva
interferencia política” y que las aportaciones van
encaminadas a generar unas reformas que
“desencadenen dinámicas de mejoras” y que “se
sustenten en amplios consensos”.
Ha matizado que la Sanidad y lo sanitario “no pueden
seguir tratándose como gasto”, sino como “inversión” y
ha abogado por la capacidad de generar grandes
acuerdos, desde un núcleo central que apueste por un
modelo sanitario público y sostenible.
Se ha preguntado si están dispuestos a asumir
diagnósticos y propuestas externas y poner nombre a
un informe que estudie las propuestas, al igual que
sucedió en su día con el Informe Abril, y acordar quien
participará en él.
El Dr. Romero ha cuestionado la “falta de voluntad
política” para llevar a cabo los diagnósticos y
tratamientos y las reformas necesarias. “No debemos
salir de esta crisis de salud pública para volver a
encontrarnos con la misma realidad que dejamos en
marzo. Un sistema nacional de salud sin recursos
económicos suficientes para seguir manteniendo los
criterios que nos hicieron ser referentes, unos
estándares en base a resultados, que no se engañen,
son consecuencias del trabajo y el esfuerzo de los miles
de profesionales sanitarios, los mismos que han sido
capaces de doblegar una amenaza como nunca
podíamos imaginar, la vuelta a unas listas de espera que
van a suponer otro reto asistencial, la precariedad en el
empleo y la falta de políticas de recursos humanos en
salud, las bajas y deterioradas retribuciones, y un
personal abatido, indignado y cansado tanto física
como emocionalmente. Toca recordar a Ramón y Cajal
cuando nos decía “Las ideas no duran mucho. Hay que
hacer algo con ellas”.
Para el presidente del CGCOM, subyace una
“expropiación de competencias a las autoridades
sanitarias por parte de las económicas”. “Ministros y
consejeros de Sanidad dan la cara, pero casi todo acaba
dependiendo de otros que no aparecen”, ha precisado.
Ha asegurado que “la profesión médica se siente
maltratada y exige a los responsables políticos e
institucionales que repongan la desinversión, que
incrementen el músculo profesional, y que aporten
retribuciones y calidad de empleo para que podamos
seguir centrados en nuestra tarea, mejorando la
medicina y el Sistema Nacional de Salud”.
Antes de desglosar las propuestas, ha recordado la
renovación del contrato social que llevó a cabo la
profesión médica en el mismo escenario, la sala Ernest
Lluch del Congreso, coincidiendo con la apertura del
centenario del CGCOM. Y ha hecho alusión a los
posicionamientos de ese “compromiso con la sociedad”,
que pasan, entre otros, por “defensa y apoyo al modelo
sanitario del SNS y por asumir un papel activo de tutela
de los derechos de los ciudadanos a la protección de la
salud contemplados en la Constitución Española”.
